La recolección y transporte de los residuos que se generan como consecuencia directa de las diferentes actividades desarrolladas por la sociedad se convirtió en un aspecto relevante para los gobiernos y la sociedad en el marco de la pandemia por el coronavirus
Por esto, desde el comienzo del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO) en Argentina, el pasado 20 de marzo, el traslado de la basura hasta su disposición final en los rellenos sanitarios fue considerada una tarea esencial para un país en emergencia sanitaria.
En la región sur de Santa Fe, a pesar de la cuarentena estricta que implementaron las autoridades provinciales, en sintonía con la propuesta nacional, la generación de residuos sólidos tuvo un equilibrio. Mientras la basura doméstica crecía por la permanencia de los ciudadanos en sus hogares, los desechos provocados por industrias y comercios disminuían por la suspensión de la mayoría de las actividades económicas en las primeras semanas del ASPO.
Para conocer en detalle cómo se desarrolla la recolección y disposición final de residuos en la zona sur de la provincia, Industria Ambiental conversó con Horacio Rapetta, apoderado de Séptima Región y socio gerente de 3R.
“Somos una empresa que estuvo siempre dentro de las actividades esenciales, así que nunca dejamos de trabajar”, señaló el empresario y agregó: “Tuvimos que generar protocolos y una vez que nos organizamos seguimos operando de la misma manera. Hasta ahora estuvimos bien, sin ningún contagio en nuestras dos empresas”.
Séptima Región S.A es una organización dedicada a la gestión de residuos domiciliarios y materiales de desecho asimilables a urbanos. La firma fundada en 1999, busca darle diariamente tratamiento y disposición final a dichos desechos reduciendo el impacto sobre el medioambiente. Los tres ejes fundamentales de la firma son: los procesos eficientes (para que las operaciones garanticen la perduración del proyecto a lo largo del tiempo), la gestión responsable de los deshechos y correcta disposición para evitar impactos negativos al medio ambiente, y el desarrollo de servicios sustentables (la actividad se encuentran en constante renovación con el asesoramiento adecuado para garantizar el éxito de las operaciones actuales y futuras).
En tanto, Tres Erres SRL, es una compañía que nació en 2013 con el objetivo de ofrecer un servicio de transporte y recolección de residuos sólidos urbanos e industriales compatibles. Para esto, cuenta con camiones equipados con cajas compactadoras para realizar servicios de recolección de residuos domiciliarios y de grandes generadores, así como también un sistema de cajas roll off para volúmenes más grandes de basura (entre 14 y 30 metros cúbicos). “Era una necesidad tener una empresa de transporte propia para poder solucionar los problemas de los clientes”, recordó el directivo de la empresa ubicada en la ciudad de Pérez, Santa Fe.
Sobre la adaptación de la rutina en las dos empresas, para operar durante la pandemia del covid-19, Rapetta aclaró que en la recolección de basura la mayoría del trabajo se realiza automáticamente, por medio de dispositivos mecánicos, y los empleados “prácticamente no tienen contacto con los residuos”. “El punto mayor de contagio lo podés tener cuando vas a la balanza (para el pesaje de camiones), o en alguna empresa que visitan los trabajadores”, comentó.
“En la parte del relleno, donde nosotros teníamos cooperativas trabajando en la clasificación de residuos, suspendimos todo hasta que comenzó a abrirse un poco la cuarentena”, indicó Horacio y continuó: “Firmamos un convenio con las asociaciones y empezamos a imponer un protocolo, que hicimos junto a la Municipalidad de Pérez, para los trabajos en los residuos industriales, no en los RSU (Residuos Sólidos Urbanos)”. En cuanto a la urgencia de volver a poner en marcha la selección de basura, el empresario afirmó: “Había que darle una salida laboral a esta gente que estaba colgada”.
Separación y reducción de residuos
Las dos cooperativas de recicladores, que contribuyen a la separación y reducción de residuos que no son separados en el domicilio o negocio, trabajan en el predio de relleno sanitario desde hace más de una década.
Los integrantes de la asociación tienen un horario de ingreso y otro de salida, que es controlado por el personal de seguridad del lugar, y se retiran del predio con los residuos que seleccionaron para comercializarlos de forma independiente.
“Les damos el lugar para que ellos reciclen y que se lleven lo que les sirve económicamente”, explicó el apoderado de Séptima Región, y remarcó: “Viven de esto desde hace años, son siempre los mismos (cerca de 90 familias) y no se deja entrar a otros”.
Además, la realización de la separación de residuos en un relleno sanitario garantiza el tratamiento correcto de los desechos que no son seleccionados para reciclar y evita la posible generación de basurales a cielo abierto en diferentes zonas del ejido urbano.
Menos desechos industriales y comerciales por el ASPO
La empresa de la familia Rapetta brinda un servicio de disposición final de residuos sólidos urbanos e industriales compatibles, para empresas de diferentes rubros, industrias (como Cargill, Acindar, Paladini, Molinos Río de la Plata, entre otras) y municipios (Funes, Pérez, Acebal, Zavalla, etc).
A lo largo de la cuarentena, Horacio no percibió un incremento en la cantidad de desechos domiciliarios que llegaron al predio de la ciudad de Pérez, pero sí detectó el descenso en la prestación de servicios a clientes particulares que tuvieron que suspender sus actividades por varias semanas.
“Cayó la recolección en bares, kioscos o comercios”, aseguró el socio gerente de 3R y comentó: “No noté una cantidad mayor de basura. A nosotros nos incrementa la cantidad de residuos domiciliarios cuando es temporada turística en Funes y la zona, de la primavera hasta marzo”. También, la implementación de la cuarentena estricta provocó que las casas de fin de semana de las localidades vecinas a Rosario queden deshabitadas por un tiempo, y por ende, la generación de basura en dichos domicilios sea nula.
Pensar en verde
El tratamiento y disposición final a residuos domiciliarios y compatibles que realiza Séptima Región tiene como objetivo reducir el impacto producido en el medio ambiente, y persiguiendo este fin, la empresa se fue adaptando a las nuevas normativas de Santa Fe.
“En los 21 años de Séptima Región nos adaptamos a todas las normativas. Cuando creamos la empresa, en 1999, no había una ley de relleno sanitario, de cómo disponer la basura”, recordó Rapetta y afirmó que a partir de 2002 se fueron sancionado leyes para regular el tratamiento y disposición final de los residuos.
Desde el año 2009, está vigente en Santa Fe la Ley N° 13.055, en la que la Provincia reconoce la importancia de adoptar el concepto de "Basura Cero" como principio fundamental para la gestión de los residuos sólidos urbanos en su territorio. En concordancia con los objetivos de esta norma, Séptima Región S.A presentó un proyecto de instalación de una planta de separación y recuperación de los residuos domiciliarios recolectados en la ciudad de Funes mediante métodos de separación en origen. De esta manera se proyecta reducir en un 40% la cantidad de materiales provenientes de esta localidad que se destinan al relleno sanitario.
Según el artículo 3 de la normativa, “se establecerá en la reglamentación un cronograma de reducción progresiva de la cantidad de residuos depositados en rellenos sanitarios, tomando como base el total de los residuos dispuestos en el año 2008”. La prohibición de la disposición final en relleno sanitario de materiales tanto reciclables como aprovechables debe cumplirse para el año 2030.
También, el predio de la empresa, que se encuentra a una distancia aproximada de 3 km del área urbana de Pérez, cuenta con un estudio de impacto ambiental aprobado por la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) de la Provincia de Santa Fe, mediante Resolución 0176/03.
“Nos vamos aggiornando paso a paso”, destacó Horacio y añadió: “Son vallas que se van poniendo en el camino y las tenés que ir superando para crecer”.
