En los últimos años, varias empresas argentinas comenzaron a incursionar en la generación de energía a través de biomasa, con el propósito de enfrentar la crisis energética y lograr una producción más sustentable.

De esta forma, las innovadoras compañías empezaron a producir energía a partir de los desechos provenientes del sector agrícola, las distintas industrias de la región y los residuos sólidos urbanos (RSU).

Sin embargo, se desperdician enormes cantidades de biomasa, que se descartan y quedan sin utilizar, por una simple razón: falta de eficiencia en el traslado de la materia orgánica. En algunas ocasiones, la conversión de los desechos en energía se produce en plantas con infraestructura idónea y a cientos de kilómetros del lugar donde se origina el residuo. Por lo tanto, este proceso requiere de costos adicionales como la contratación de un transporte y la mano de obra para la carga y descarga del vehículo. De esta forma, procesar estos residuos resulta caro y muchos productores pueden considerarlo comercialmente inviable.

Para solucionar esta problemática logística y económica de las empresas que apuestan por una producción más amigable con el medio ambiente, la firma Helvética SA, una de las empresas líderes del mercado nacional de fabricantes de acoplados y semirremolques, introdujo en el país una nueva tecnología que garantiza eficiencia y sustentabilidad en el traslado de biomasa: las unidades de piso móvil (walking floor).

“Es una unidad de negocio relativamente nueva en Argentina. Esta tecnología fue inventada hace 50 años en Estados Unidos, dirigida al agro y era una solución para mover graneles de mucho volumen, de baja densidad. Su función era poder optimizar la carga transportada por viaje y  facilitar su descarga y manipulación”, explicó Matías Vacca, gerente comercial de Helvética, en diálogo con Industria Ambiental, y agregó: “Esta tecnología te independiza de tener gente para descargar la unidad”.
Si bien tiene múltiples aplicaciones, este nuevo tipo de acoplado es ideal para transportar biomasa, dado el volumen de las unidades y la practicidad para su movimiento que ofrece el sistema de piso móvil.

En cuanto a la implementación de estos nuevos semirremolques en el país, el responsable comercial de la empresa emplazada en el Parque Industrial de Cañada de Gómez dijo: “La empezamos a desarrollar hace 7 años, en Argentina, de la mano de transportistas que trabajan con los principales semilleros, como Monsanto (hoy Bayer), los cuales llevan la espiga de maíz que se cosecha en diferentes campos del país hacia las plantas de procesamiento (ubicadas en Rojas, Pergamino, Venado Tuerto, etc), donde obtienen la semilla que luego embolsan, palletizan y distribuyen”.
 “Históricamente este movimiento lo hacían con el tradicional chasis y acoplado, pero con este tipo de semirremolque de piso móvil, dependiendo de la humedad del material, logran transportar entre 20 o 25% más de volumen por viaje. Ahí hay una clara eficiencia en la logística. Además no se necesita del volquete para su descarga”, destacó Matías.
Los remolques con sistema walking floor tienen una capacidad de carga del orden de los 35 mil kilos y pueden llevar hasta 28 pallets. A diferencia de “las bateas de vuelco trasero cerealeras, que generalmente tienen un cubicaje de 40 a 50 metros, los pisos móviles van de los 85 a 100”. “Con el mismo costo fijo estás entregando el doble de mercadería por viaje, por lo tanto la facturación se duplica”, señaló el gerente comercial de Helvética, y añadió: “Con el piso móvil prácticamente no hay riesgos de tener un accidente de trabajo, ya que opera con un control remoto y en no más de 15 minutos descargaste la unidad.  Este beneficio extra que no es menor”.

Una empresa histórica que no se queda en el tiempo

Helvética fue fundada en 1904 por Abel Romegialli, un inmigrante proveniente de Mendrisio (Suiza), en la ciudad de Canaña de Gómez. Luego de fabricar productos para el hogar (gasógenos, cocinas económicas, herrería de obra y todo lo concerniente a trabajos mecánicos) por varios años, en 1925 la firma inicia la construcción de acoplados, una actividad que comenzó a avanzar para no volver a detenerse. “Helvética fue fundada en 1904, ya tiene más de 115 años de trayectoria. Es una empresa sinónimo del rubro transporte y siempre fue pionera en remolques”, aseguró Vacca.

La fábrica siempre se caracterizó por el alto nivel de innovación, tanto es así que fue la primera empresa de su tipo en instalar una acería propia, en incrementar las capacidades de carga a partir de la fabricación de nuevos modelos de acoplados y en emplear más de 500 trabajadores en la región.

Luego de sufrir los vaivenes económicos del país, la tradicional firma quebró en la década de los noventa y a partir del año 1999 una nueva sociedad denominada Helvética S.A. adquirió la marca. “Hace más de 20 años que es propiedad de una familia rosarina que la sacó de aquella situación”, indicó Matías y continuó: “Se decidió comprar un predio de nueve hectáreas en el Parque Industrial de Cañada de Gómez (ubicado en la intersección de la Ruta Nacional 9 y la Provincial 91), donde se hizo una nave de más de 20 mil metros cuadrados con un concepto de fabricación tipo terminal automotriz, con la idea de crecer fuerte en el volumen de producción”.

La nueva planta fue concebida desde cero con dispositivos y equipamiento totalmente nuevos. Cuenta con un moderno lay out, una línea de armado de chasis, cabinas–horno de pintura y tratamiento de partes y componentes. “El concepto fue siempre crecer a través de la productividad, de la inversión en dispositivos, equipamiento y automatización para no estar tan a expensa de esos fuertes cimbronazos que sufre nuestra economía”, afirmó el directivo de la empresa y aclaró que por el momento se está “trabajando a un 20 o 30 por ciento de la capacidad nominal que tiene la planta”.

Respecto a la comercialización de acoplados y semirremolques, el gerente comercial comentó: “Tenemos la administración central en Rosario y vendedores directos e indirectos con presencia en todo el país. El 75% de los clientes están en la pampa húmeda, por la fuerte vinculación con el agro”. “El grueso es el mercado interno, a nivel exportaciones tenemos experiencia más que nada en Uruguay, recientemente hemos hecho una exportación bastante importante de equipos forestales”, agregó Matías.

Sobre el ritmo de la actividad durante la cuarentena por la pandemia del coronavirus, Vacca expresó: “Estuvimos cerrados cinco semanas, al principio de la cuarentena, pero pasada esa situación venimos trabajando bastante bien. Además, nuestro rubro está muy movido porque el transporte nunca dejó de trabajar por ser esencial. Se dieron varios motivos para que la venta de remolque tenga una demanda muy fuerte”.

Unidades móviles para el crecimiento de las empresas

Desde que Helvética comenzó a fabricar y comercializar las unidades con piso móvil, las empresas de diferentes rubros, y sobre todo las que apuestan a la producción de energía renovable a través de biomasa, comenzaron a transitar un nuevo camino de eficiencia y sustentabilidad con la adquisición de la nueva tecnología en materia de transporte.

“Nació de la mano del agro, con cultivos más tradicionales, pero vimos que era una herramienta valorada en otros rubros de la economía”, recordó Matías, a la hora de repasar el origen del sistema walking floor.
A la hora de repasar a las firmas que apostaron por las unidades móviles para transportar sus productos, Vacca destacó el trabajo de FRESA, una compañía de Gobernador Virasoro (Corrientes) que genera electricidad utilizando como materia prima aserrín, chips y cortezas de pino y eucalipto; y biomasa proveniente de madera seca sin afectar a los bosques nativos.

“El excedente de los aserraderos, que siempre fue un problema para ellos, hoy tiene una oportunidad de comercializarlo y entregarlo a esta planta de generación de energía”, indicó el directivo de Helvética.
Otra proyecto en el cual se utilizaron unidades móviles fue el impulsado por Bio 4 Bioetanol Río Cuarto S.A (una empresa agroindustrial formada por 28 empresarios agropecuarios dedicada a la producción de bioetanol y burlanda con bajos costos). En esta ocasión, la fábrica emplazada en el Parque Industrial de Cañada de Gómez tuvo que confeccionar un acoplado especial según la demanda del cliente.

Un futuro con energías renovables

“En el mundo la principal aplicación de los pisos móviles está destinada al rubro residuos, nosotros estamos trabajando en varios proyectos vinculados a este tema en diferentes provincias del país. Vemos un potencial enorme para esta tecnología, dada la versatilidad que tiene”, remarcó el gerente comercial de Helvética, al ser consultado sobre el futuro del transporte con unidades móviles en el país y la región.

Para ampliar el horizonte de negocios e incluir a nuevas firmas en la utilización de un transporte más adecuado para biomasa, los directivos de la empresa líder del mercado nacional de fabricantes de acoplados y semirremolques llevaron a cabo distintas reuniones y mesas de trabajo con algunos organismos (INTI e INTA), autoridades de Santa Fe (de la gestión anterior), la Municipalidad y diferentes industrias importantes de la región (Cofco, por ejemplo).

“Ya hemos incorporado actores que provienen del rubro residuos y que ya están encontrando las aplicaciones. Si bien es muy incipiente tiene un potencial enorme, debería seguir la tendencia del resto del mundo”, volvió a remarcar Matías y añadió: “Si bien el 90 por ciento de la venta estuvo destinada al agro, hay un potencial enorme en el rubro residuos, el cual va a ser muy importante”.